Camada B de Castro-Castalia

¿MICROCHIP, TATUAJE O... ADN?

LA REAL SOCIEDAD CANINA DE ESPAÑA PROMULGÓ RECIENTEMENTE
 LA OBLIGATORIEDAD DE IDENTIFICAR MEDIANTE LA IMPLANTACION DE MICROCHIP
O DE UN TATUAJE INDELEBLE, HOMOLOGADOS Y RECONOCIDOS POR LA PROPIA RSCE,
A TODOS LOS EJEMPLARES REPRODUCTORES COMO REQUISITO IMPRESCINDIBLE PARA LA
INSCRIPCIÓN DE LAS CAMADAS EN EL LIBRO DE ORIGENES ESPAÑOL (L.O.E.)

Indudablemente la implantación del microchip o del tatuaje obligatorio, cumple con una función primordial como es la identificación de los perros. Con ello o con un tatuaje indeleble parece claro que será mucho más factible conocer a ciencia cierta quien es el verdadero propietario de un ejemplar y asi responsabilizarle de todo aquello que atañe a ese animal. No es pues una decisión baladí. Máxime si todos los perros, independientemente de que sean o no de pura raza, grandes o pequeños, de guarda, e compañia, de caza, etc.,  pasan a formar parte de unos registros municipales o autonómicos o incluso estatales, que posibiliten en cualquier momento y circunstancia (abandono, pérdida, robo, accidentes y otros daños a terceros, etc.) identificar al autentico propietario (léase, responsable) de esos animales.

Lo que ya no parece tan claro es qué beneficios aporta, para el criador (y el futuro propietário), la identificación de sus perros reproductores --machos y hembras-- con un microchip o un tatuaje, por muy homologado que este esté. Me explico.
           
El microchip o el tatuaje van a servir, como ya he dicho, para que cualquier perro quede registrado como siendo propiedad de tal o cual persona y no otra, aunque para que este registro sea verdaderamente eficaz han de ponerse los medios suficientes de modo y manera que resulte ágil y riguroso en todo momento y eso, lamentablemente, hoy por hoy no ocurre en nuestro país. Sin embargo, ni un sistema ni el otro van a ser auténticos garantes de que los animales asi identificados sean el padre o la madre de los cachorros que la R.S.C.E. inscriba en el Libro de Orígenes Español (L.O.E.), porque de ninguna manera serviran para comprobar ni ratificar la paternidad de las camadas. Y puede darse el caso de que algunos de quienes tengan muchos ejemplares a los que identificar "obligatoriamente", segun la nueva normativa, utilicen algun subterfugio para no cumplir con lo establecido, máxime porque a pesar de que el costo real de un microchip es despreciable, a la hora de la verdad se estan pagando fácilmente 60€ o 100€ por la implantación de cada uno y ello conlleva un desembolso muy importante en los criaderos en los que hay veinte, treinta, cuarenta o mas perros!

Si de lo que se trata es de garantizar que padres y madres de cachorros son los que los pedigries dicen que son, hay que pensar en soluciones más prácticas, más modernas y más fehacientes. Y esto significa necesariamente hablar de la implantación, con todas sus consecuencias, de la prueba de ADN para los ejemplares reproductores de pura raza.

En España son ya varias las Facultades de Veterinaria que están adscritas al denomidado "Proyecto Internacional del Genoma Canino" --entre ellas las de Barcelona, Madrid y Zaragoza--; un estudio que está integrado por las más prestigiosas Facultades de Veterinaria del Mundo (a través de las Cátedras de Genética), mediante el cual se estudian y tratan de identificar los genes que  causan las enfermedades hereditárias y cuyos logros y avances estan contribuyendo de forma muy significativa a erradicarlas.

El costo de una prueba individual de ADN es similar al microchip, si bien es verdad que la mayoria de las Universidades se han ofrecido a realizar las pruebas a un precio muy inferior, si se practican a través de Clubes o de la propia R.S.C.E. y de forma masiva. No olvidemos que a mayor número de perros identificados genéticamente, mayor es tambien el progreso de los estudios del Proyecto del Genoma Canino y más fácil la localización de los "genes malos" y por tanto va en beneficio no solo del propio proyecto sino de la futura calidad de los ejemplares que se seleccionen como reproductores el dia de mañana y de aquellos otros nacidos de cruces entre animales asi identificados.

Pero además de que las pruebas de ADN cumplan con esta importante misión, la de seleccionar y mejorar la calidad genética de los posibles reproductores y sus descendientes, ofrecen otra posibilidad no menos interesante; la de ratificar la paternidad y, por tanto, evitar el fraude que, desgraciadamente, ocurre con alguna frecuencia en la inscripción de camadas y en el otorgamiento de los consiguientes pedigríes.

Por tanto y si queremos situarnos de verdad a la cabeza de la Cinofilia internacional, tenemos en la identificación mediante A.D.N. uno de nuestros mejores aliados.  Y seria bueno que a corto plazo vieramos cómo la R.S.C.E. recoge el testigo de la modernidad y el futuro.

Cierto es que quizás no sea posible hacerlo de hoy para mañana; hay que establecer unos plazos y posibilitar el que los criadores se pongan al dia. Pero no es menos cierto que los hay que ya han incorporado a las garantías que ofrecen a los futuros propietários, la expedición de un Certificado de ADN del padre y la madre de los cachorros que ceden y muchos otros que lo harían encantados, si se dieran a conocer sus beneficios y se les ofrecieran las máximas facilidades.

¿QUÉ ES EL ADN?                     

El ADN, o acido desoxirribonucleico, es el ácido nucleico formado por dos cadenas de nucleótidos, unidas por puentes de hidrógeno. Cada nucleótido del ADN consta de una pentosa, la desoxirribosa, una molécula de ácido fosfórico y una base nitrogenada que puede ser adenina, guanina, citosina o timina. No todas las bases pueden unirse entre sí, sólo lo hacen las que son complementarias, es decir la adenina con la timina y la guanina con la citosina.

En el ADN los nucleótidos se disponen en dos cadenas donde los nucleótidos de cada una se unen mediante las moléculas de ácido fosfórico, con enlace entre el carbono-3' de la desoxirribosa de un nucleótido y el fosfato del siguiente; la pentosa se une mediante un enlace entre su carbono-1' y la base nitrogenada y los puentes de hidrógeno que unen las dos cadenas de nucleótidos se establecen entre las bases nitrogenadas enfrentadas.

Esta estructura, propuesta por Watson y Crick en 1953, recuerda a una escalera de mano donde las bases con sus puentes de hidrógeno son los peldaños de una escalera que se arrolla en un helicoide de unos 20Ä de diámetro y que describe una vuelta completa cada 34 Ä, siendo la distancia entre cada dos nucleótidos de 3,4 Ä.

El ADN es el portador de la información genética de los seres vivos; forma parte de los cromosomas y se encuentra fundamentalmente en el núcleo celular, aunque también aparezca en determinados orgánulos citoplasmáticos como las mitocondrias y los cloroplastos.

El Dr. Alec Jeffreys de la Universidad de Leicester (UK) fue el primero en describir el ADN de un ser humano en el año 1935 y desde entonces su estudio ha servido para demostrar la paternidad en individuos de muchas especies animales. En el caso de los perros, la primera vez que se empleó este método para la identificación de una camada, se hizo con cachorros de Siberian Huskies previo su registro ante el Kennel Club Británico. En la crianza caballar el ADN es una técnica ampliamente difundida y reconocida en todo el Mundo.

EL AMERICAN KENNEL CLUB Y EL ADN

En enero de 1998 el AKC estadounidense puso en marcha el llamado "DNA Certification Program" (Programa de Certificación de ADN), con carácter voluntario, con la intención de que en el mismo se integren todos aquellos criadores que quieran inscribir a sus reproductores machos y hembras a los que previamente se haya realizado un estudio del ADN. Para realizar dicho análisis (con un coste de 40$) basta con solicitar del AKC un Kit especifico (gratuito), tomar la muestra, enviarla a la propia entidad y en un plazo relativamente corto del tiempo el animal queda debidamente identificado y recibe un Certificado cuyo numero de serie se adjunta a toda la documentación del animal, incluídos los pedigries de sus hijos.

Asimismo es obligatorio desde octubre del 98 que el semen que se recolecte de cualquier ejemplar macho (sea o no estadounidense), tanto para una inseminación en fresco como para aquellas otras que se hagan con semen refrigerado o congelado --siempre que esta se realice en territorio de los EE. UU.--,   proceda de un perro que previamente haya recibido una "Certificación de ADN", requisito imprescindible para que la inseminación pueda llevarse a efecto en USA y la camada resultante pueda ser inscrita en el AKC.

Más recientemente aún,  el Comité de Dirección del AKC ha decidido dar un nuevo paso en la consecución de la total identificación de los reproductores de pura sangre; así, a partir del 1 de julio de 2000, todos aquellos perros que hayan de producir más de siete camadas a lo largo de su vida reproductora y aquellos otros que produzcan mas de tres camadas al año, deberán contar con  una "Certificación de ADN" obligatória, emitida por el propio AKC.

Por otra parte, y siempre con el unico objetivo de luchar contra el fraude en los pedigríes y perseguir y poner coto a las llamadas "granjas caninas" (puppy mills), el AKC ha decidido realizar inspecciones de control rutinarias en los criaderos, sin previo aviso a sus propietarios.

Cabe destacar que el AKC, además, apoya economicamente con importantes subvenciones el llamado "Proyecto del Genoma Canino" desde hace varios años, como tambien lo hacen los más reputados Clubes de Raza norteamericanos

(Texto original, escrito por Christina de Lima-Netto y/o Federico Baudin específicamente para esta página Web y protegido con Copyright. No puede ser reproducido ni total ni parcialmente por ningún medio, sin el expreso consentimiento de Castro-Castalia por escrito)