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NUESTRA PERICIA Y CUIDADO SON LAS AUTÉNTICAS CLAVES PARA LOGRAR SACAR ADELANTE, CON ÉXITO, UNA CAMADA DE HUÉRFANOS. ES UNA LABOR COMPLICADA Y NO EXENTA DE ZOZOBRA Y PREOCUPACIÓN PERO QUE, CUANDO REALIZADA A CONCIENCIA, SE VE SUFICIENTEMENTE COMPENSADA CON LA ALEGRÍA DE VER CÓMO LOS BULLICIOSOS CACHORROS CRECEN Y SE DESARROLLAN PLENAMENTE PARA LLEGAR A CONVERTIRSE EN ADULTOS SANOS Y EQUILIBRADOS. En el capítulo anterior supimos de la dificultad que entraña sacar adelante una camada de recién nacidos huérfanos, máxime si no han tenido ocasión de mamar de la madre los primeros calostros, esenciales para proteger su incipiente y poco desarrollado sistema inmunológico. Felizmente para nosotros, en la actualidad existen ya en el mercado fórmulas artificiales que se administran por vía oral y que sustituyen con suficiente garantía a esos calostros maternos. Cabe también la posibilidad, en caso de alto riesgo de infección, de tratar a los pequeños con medicamentos específicos administrados en inyección, práctica esta que debe ser siempre consultada con el Veterinario. HERPESVIRUS También hablé de la importancia de mantener una temperatura ambiente estable dentro de la habitación-paridera, durante las tres primeras semanas de vida de la camada. en torno a los 30º e incluso a veces llegando hasta los 33º C, procurando siempre mantener al propio tiempo un grado suficiente de humedad (mediante la colocación de humidificándoles o, en su defecto, de cuencos de agua fresca distribuidos por todo el área del recinto en cuestión). Ya sabemos que los cachorros recién nacidos no pueden regular su temperatura corporal y dependen de una fuente de calor externa para mantenerse en torno a los 35,5-36º C que es lo ideal, y si bien es costumbre bastante asentada colocar una bombilla de infrarrojos sobre la caja paridera (o una manta eléctrica), que evite el riesgo de hipotermia lo cierto es que la razón por la que la habitación debe mantenerse caldeada, en su totalidad, es bien otra; se trata de evitar el riesgo de una infección por herpesvirus, una de las principales causas de muerte perinatal. Y hoy se sabe que a una temperatura ambiente de entre 31º y 33º C el herpes se inactiva. Y el riesgo, por tanto, se minimiza e incluso desaparece. MADRES DE ALQUILER En ocasiones puede pensarse en utilizar a otra hembra recién parida, que haya tenido pocos cachorros propios o que esté al final de la etapa de lactación de su propia prole, para encargarla de sacar adelante a los huérfanos. Esta es una práctica bastante habitual en grandes criaderos donde es fácil que varias sean las perras que coincidan estar criando a la par, pero no así entre particulares cuyo único objetivo haya sido criar una camada como algo excepcional o entre criadores que apenas críen una camada cada cierto tiempo. Que una perra del propio entorno se haga cargo de una camada ajena no es extraño (uno de los casos más sonados que conozco fue el de una Whippet que, allá por los años setenta, crió a sus propios cachorros y a una camada de Bullmastiffs); además se cuenta con la ventaja de que al vivir en el mismo ambiente, no aportará “nuevos inquilinos” (me refiero a agentes infecciosos de riesgo) al ambiente. El problema reside en el hecho de tener que introducir a una perra de fuera y conviene siempre calibrar los riesgos añadidos que tal decisión puede acarrear; dependiendo de las circunstancias muchas veces puede ser preferible asumir la tarea directamente y criar la camada sin intervención ajena. EL DESTETE Si todo transcurre con normalidad, las primeras semanas pasaran en un santiamén; las orejas y los ojos sellados irán despegándose paulatinamente, los animales se moverán cada vez con más soltura por la caja paridera e irán buscando de forma espontánea un lugar lo más alejado de allí donde eligen dormir, para hacer sus necesidades ya por sí mismos DESARROLLO FÍSICO PRIMARIO EN EL CACHORRO
Su peso irá aumentando paulatinamente y su tamaño crecerá a la par. Alrededor de las 3 semanas empezarán a despuntar los primeros dientes de leche y ese es el momento ideal para introducir los primeros cambios en la dieta y empezar a acostumbrar a los pequeños a alimentos en forma de papilla. Personalmente me gusta comenzar a destetar a mis cachorros hacia el día 18 ó 20 de edad, presentándoles una papilla muy diluida en un platillo llano; mojo la punta de mi dedo con esta mezcla y doy un par de toquecitos en sus trufas, que inmediatamente chuparan. Siguiendo su olfato y con la ayuda de una visión incipiente y todavía borrosa, enseguida localizarán el plato y lamerán de él sin demasiadas complicaciones, aunque lo más probable es que acaben con papilla por todas partes y al terminar la ración hayan de eliminarse los restos con la ayuda de una esponja humedecida en agua tibia (o toallita dodot) y luego secarles bien para que no se enfríen. El guirigay suele ser tan exagerado que lo normal es que haya que cambiar también el forro de la paridera por uno limpio y seco, tras cada ingesta. En un par de días o tres, acostumbrados ya al sabor y la textura de la papilla, se irá haciendo una mezcla cada vez más consistente; es importante que cada cachorro coma de su propio platillo para así controlar lo que ingiere y también que a partir de ese momento dispongan permanentemente de un cuenco de leche maternizada, al que acudir para mitigar la sed. Leche que cada vez se irá diluyendo más en agua, hasta acostumbrarles al sabor de esta, pues a partir de la 4ª-5ª semana el destete habrá terminado y ya solo beberán agua fresca y comerán pienso seco o ligeramente reblandecido también en agua tibia. CACHORROS CURIOSOS Con el destete empieza también la fase de socialización; los cachorros se tornan sumamente curiosos, todavía no conocen el miedo, y querrán investigarlo todo. Seremos nosotros, a falta de la madre, quienes debamos incitarles a explorar el mundo que les rodea y quienes infrinjamos el “castigo” (una sacudida ligera agarrando al animal por el pellejo del cuello) siempre que, en sus momentos de juego, se propasen con un contrincante imaginario y le mordisqueen más de la cuenta hasta hacerle llorar. Mediada la quinta o sexta semana es bueno que empiecen a salir al exterior, a una zona acotada y libre de peligros, en las horas más templadas del día, para que vayan familiarizándose con el entorno, con los ruidos y con los demás perros de la casa, si los hubiera. ADELANTAR LA PRIMOVACUNACIÓN Por lo demás, el calendario de desparasitación y vacunación es similar al que debe llevarse a cabo en circunstancias normales, es decir cuando no se trate de cachorros huérfanos, aunque quizás en algunos casos convenga sopesar la necesidad de adelantar la primovacunación algunos días, y es importante consultarlo con el Veterinario, sobretodo cuando se trate de cachorros que no han podido disponer de los calostros maternos ni tampoco han sido tratados con productos alternativos o de aquellos otros que vivan o hayan de viajar a zonas en las que tal o cual enfermedad es endémica. Quizás la clave para lograr sacar adelante a una camada de huérfanos resida, sobretodo, en la calidad de la atención que podamos dedicar a los neonatos y en el máximo tiempo que podamos invertir en su cuidado, en su imprinting y en su socialización. Y también en ser capaces de observar una escrupulosa higiene, evitar riesgos innecesarios y ofrecerles, de manera instintiva, la seguridad y el mimo con que les obsequiaría la propia madre. Por ello puede decirse que aunque a primera vista parezca una tarea difícil, la crianza de cachorros huérfanos no es en absoluto imposible y a la postre, cuando crecen y los ves convertidos en adultos sanos y felices, te queda una satisfacción muy especial al constatar que lo has conseguido. (Texto original, escrito por Christina de Lima-Netto y Federico Baudin específicamente para esta página Web y protegido con Copyright. No puede ser reproducido ni total ni parcialmente por ningún medio, sin el expreso consentimiento de Castro-Castalia por escrito). |