Castro-Castalia Bullmastiffs

Ejercicio en un Bullmastiff, recomendaciones, Castro-Castalia Bullmastiffs
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Manual del Cachorro Bullmastiff, Castro-Castalia Bullmastiffs

Ejercicio en un Bullmastiff, recomendaciones, Castro-Castalia Bullmastiffs

Khalim de Castro-Castalia

¿Cuantos bebés de pocos meses has visto tu realizando juegos malabares o entrenando para la alta competición? Seguro que ninguno. Las razones son obvias. Hay que darles tiempo para crecer y para que sus huesos, sus articulaciones, su masa muscular, todo su esqueleto --en suma-- se vaya amoldando y ahormando. Y eso no se consigue ni en dos años, ni en cuatro... ni siquiera en seis.

El caso de los Bullmastiff (y de todos los perros de razas gigantes) no es muy distinto. Cierto que la vida media de un perro es notablemente inferior a la del ser humano y por tanto sería absurdo pensar que vaya a tardar en alcanzar en cenit de su desarrollo siete u ocho años. Pero no es menos cierto que antes de los dos años las hembras y los tres años o tres años y medio, los machos, por muy grandes que sean y por muy "mayores" que parezcan, su osamenta y su estructura están todavía en fase de desarrollo y ahormamiento.

Hoy se sabe que los excesos son peligrosos y muy negativos. Y no solo en lo que a ejercicio se refiere, sino también y como en seguida veremos, en lo que se refiere a la alimentación.

Por eso es tan importante que respetes los tiempos.

Es esencial que tu cachorro duerma y descanse lo suficiente. Y lo suficiente son por término medio unas doce-dieciséis y hasta dieciocho horas diarias. Más aun, durante los primeros dieciocho meses de vida, el ejercicio debe ser muy controlado y no superar las dos-tres horas por día. Ejercicio es correr, saltar, subir y bajar escaleras, tanto como lo es caminar a buen paso o despacio o sencillamente jugar! Por lo tanto, deberás ser capaz de conseguir armonizar todo esto de tal manera que tu cachorro pase no más de dos o tres horas a lo largo de cada día dedicado a hacer todo esto. El resto del tiempo, procura limitar sus espacios y actividades. No se trata de que lo encierres en una jaula, pero sí que aproveche las horas que tu estas fuera de casa, por ejemplo, para dormitar o para mordisquear sus juguetes (y huesos) sin realizar grandes dispendios de energía, de acá para allá.

Son siempre preferibles los paseos cortos varias veces al día, que esos otros interminables que lo dejarán exhausto. Mejor cuatro o cinco o seis paseos de diez-quince minutos que dos de hora y media. En cada uno de esos paseos recuerda establecer tres fases distintas; una de calentamiento, a paso lento-moderado, de unos cinco minutos --para poner el cuerpo en marcha; otro de diez minutos a buen paso o incluso a la carrera --si las condiciones del lugar lo permiten-- y finalmente otro de cinco minutos de paso tranquilo y pausado, para no interrumpir de golpe la actividad, que tampoco es bueno, y devolver al estado de descanso todo el organismo.

Ya tendrás tiempo, superada la fase de máximo crecimiento (hasta los doce-dieciocho meses, dependiendo de que se trate de una hembra o un macho) de realizar ejercicio más amplio.

Un buen sustituto y quizás el mejor consejo que puedo darte en este sentido, es que si tienes ocasión, permitas a tu perro que camine por la arena blanda de la playa mejor que por el duro asfalto, pues el traqueteo en superficies lisas y duras es el gran enemigo de las articulaciones de los perros. Si la climatología lo permite, incita a tu perro a meterse en el agua (de la playa o de una piscina o lago) siempre, claro, teniendo en cuenta la fuerza de la corriente y solo cuando estés muy seguro de que no se irá a zonas donde esté fuera de tu control y que puedan ser peligrosas pues muy desgraciadamente, un perro exhausto (y en el agua se agotan con facilidad) es incapaz de mantenerse a flote y se ahoga en pocos minutos! Lo ideal es que siempre que sea posible, te metas en el agua con el y lo controles por medio de la cadena Flexi (que continuará sirviéndote para este menester durante muchos años aún cuando no para pasearla por la calle). Pero no olvides que al salir del agua, tanto si es de mar como si es de piscina tratada con cloro, tendrás que darle una ducha de agua dulce (sin jabón) y secarle al máximo, para evitar que la humedad continuada acabe siendo causa de las desagradables artrosis y artritis que afectan a los perros en etapa senescente!

Las escaleras --me refiero a los grandes tramos, ¡no a dos o tres escalones!-- son otro de los grandes enemigos de los Bullmastiff en etapa de crecimiento; por tanto procura evitar que las ande subiendo y bajando demasiadas veces al día. No pasa nada por que para ir y volver de la calle tenga que subir uno o dos pisos, pero si vives en una casa de varias alturas procura que no pase todo el día arriba y abajo y si es necesario, instala un SEPARADOR DE PUERTA (sirven los que se venden en grandes comercios para bebés), de tal manera que no pueda acceder a las escaleras si no es bajo tu control.

Otro dato que has de tener en cuenta es que las superficies enceradas de madera, el mármol o la piedra artificial, el sintasol y el PVC y también los revestimientos cerámicos, son sumamente resbaladizos; los perros de gran peso no están preparados para "agarrarse" bien y se escurren con excesiva facilidad y demasiada frecuencia. Estos son otros de los grandes enemigos del esqueleto canino de los grandes molosos y contribuyen muy desgraciadamente, en gran medida, a causar una serie de problemas de huesos que se evitarían si el animal no se resbalara constantemente. Por lo tanto, procura colocar estratégicamente por toda la casa alfombras antideslizantes, en aquellos lugares que se corresponden a esos donde tu perro tendrá que moverse habitualmente, para evitar que se escurra cuando corre, cuando salta y sencillamente cuando hace algún quiebro o gira por un ángulo concreto para ir a cualquier otra parte. Será una pequeña inversión inicial que te ahorrará muchas facturas veterinarias y disgustos a largo plazo; créeme.

El Bullmastiff no es un perro cazador, pero sí un excelente rastreador. No le pidas que corra detrás de un balón como haría un Bóxer o un Cócker, pues salvo honrosísimas excepciones (yo he comprobado que nuestros atigrados disfrutan jugando con una pelota como los que más, pero no así los leonados!) eso de ir detrás del esférico o del "apport" les parece una solemne pérdida de tiempo, una autentica bobada. Sin embargo constatarás con frecuencia que pega la nariz al suelo y camina ensimismado tanto como se le permita, olfateando un rastro oloroso cualquiera, especialmente en las salidas al campo. Pues bien, dado que eso le gusta, siempre que los tiempos empleados en esta actividad ciertamente lúdica se correspondan con los que te has marcado, especialmente durante el primer año y medio, permíteselo. Le encantará hacer de Inspector Gadget!.

Ejercicio es también corretear por un parque con otros perros, en las zonas acotadas para tal efecto y créeme, es importante que tenga oportunidad de relacionarse con otros congéneres, de las más variadas tallas y condiciones, cuanto más mejor, sobretodo durante los primeros meses, para que luego continúe siendo un adulto civilizado y sociable con otros perros. Pero si el parque al que has de ir está a mas de cinco o diez minutos de caminata, recuerda lo dicho antes; toma el coche y conduce hasta allí, ahorrando así invertir parte del tiempo destinado a hacer ejercicio en esa caminata, de tal manera que el tiempo que pueda pasar con sus amigos de cuatro patas, sea el máximo posible, sin exceder ni sobrepasar los límites de lo verdaderamente aconsejable. Superada la etapa de máximo desarrollo (entre los 3 y los 10 meses) ya puedes acudir al parque caminando todo el trayecto, sin problemas.

Ten en cuenta que como el dispendio de energía en ejercicio es acumulativo, si un día os pasáis por cualquier motivo, entonces, al día siguiente, recorta un poco las actividades, de tal manera que le de tiempo a recuperarse. Ten en cuenta que aun a pesar de lo exagerados que resultan en apariencia estos consejos, son los mejores que te puedo dar y su acatamiento repercutirá en el bienestar de tu amigo.

Ten bien presente que en una casa con niños pequeños, el cachorro pasará muchas horas jugando con ellos; es esencial que controles estos juegos y que los pequeños aprendan que el animal necesita descansar y no puede estar continuamente en acción. Notarás que el ejercicio que realiza con los chiquillos es excesivo cuando veas que los dedos de las manos se separan, que los metatarsos se reblandecen y las manos pierden el aplomo típico de “gato” para parecerse más a las de “liebre” y cuando los aplomos de las patas traseras se desvían y los corvejones se cierran o se separan demasiado, perdiendo el paralelo. Todo esto que son auténticas señales de alarma, es suficiente para entender que el ejercicio que realiza a diario es excesivo y que puede llegar a tener importantes (muy serias) consecuencias sobre su aparato músculo-esquelético de difícil arreglo y solución.

Por otra parte y esto es esencial, recuerda que tu perro NUNCA deberá realizar ejercicio (saltar, correr, subir o bajar escaleras) desde UNA HORA ANTES DE CADA COMIDA, HASTA AL MENOS DOS HORAS DESPUÉS, para evitar el riesgo de Torsión de Estomago. Ciertamente podrás llevarle a la calle (siempre atado corto) para que haga sus necesidades, máxime porque sobretodo al principio será justo después de comer cuando le entren las apreturas, pero por favor ten bien presente que no debe jugar activamente con otros perros, ni tampoco correr, ni saltar, ni subir o bajar escaleras con el estómago lleno. En los libros de Chris tienes una amplia explicación de lo que es este síndrome, sus causas, sintomatología y riesgos y es importante que lo releas y memorices.

Por ultimo ten también muy presente que mantenerse incorporado sobre las patas traseras no es lo ideal como no lo es tampoco realizar grandes saltos en el aire (por ejemplo para atrapar un juguete o un "flyball" o "frisbee") durante el primer año y medio, así es que evita que lo haga, todo lo que te sea posible. Habrá ocasiones en que sea imposible pararle, pero acostúmbrale al máximo a no saltarte encima cuando te salude, a no ponerse sobre dos patas para lamerte la cara y cosas así que exigen un gran esfuerzo de la articulación de la cadera, para el que no está preparado ni suficientemente musculado a tan corta edad.

Perros sanos dueños felices, Castro-Castalia Bullmastiffs

Manual del Cachorro Bullmastiff

(Texto original, escrito por Christina de Lima-Netto y Federico Baudin específicamente para esta página Web y protegido con Copyright. No puede ser reproducido ni total ni parcialmente por ningún medio, sin el expreso consentimiento de Castro-Castalia por escrito).

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