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A la vista de todo lo anterior tenemos que varios son los factores que pueden desencadenar una agresión canina con resultado de muerte o de heridas graves en personas. Factores medioambientales y sociales que rodean al animal, a su propietario y a terceras personas y genéticos inherentes al perro:
Por todo ello resulta imprescindible que cualquier legislación que se establezca para tratar de mejorar la situación deba ir enfocada no solo a regular y mejorar la tenencia responsable, la crianza responsable, el adiestramiento responsable y el comercio responsable de animales genéticamente sanos, sino que además debe prohibir tajantemente la selección y cría de perros antisociales destinados al lucrativo negocio de las peleas caninas que está generalizado en nuestro país y la crianza e importación masiva de cachorros que luego son distribuidos a través de mayoristas a tiendas y o a pseudo-criadores que los venderán como propios. Asimismo se hace necesario desarrollar programas informativos y educativos a todos los niveles, para impulsar la tenencia responsable de perros y el mejor conocimiento de su psicología; estos programas deben ir destinados no solo a los propietarios sino a aquellas otras personas que están decididas a incorporar un perro a la familia y también a quienes nunca lo han tenido ni lo van a tener. Y muy especialmente a los padres de niños en edad de riesgo y a las personas mayores de 65 años, tanto si tienen como si no tienen perros, para que sepan lo que hay que hacer, y lo que no, ante un perro, sea este conocido o desconocido. Solo de esta manera, informando, educando y regulando adecuadamente la tenencia, se podrán solucionar los problemas que se plantean en este momento en la Sociedad española, preservando la especial relación Hombre-Perro que se ha venido desarrollando durante miles de años y permitiendo que continúe siendo compatible con la vida moderna. Máxime porque quienes en la actualidad ya disfrutan de la compañía de uno o mas perros, independientemente de su talla, raza, sexo, edad y características, no pueden sentirse perseguidos ni demonizados ni tampoco discriminados ni por las autoridades, ni por los medios de comunicación y mucho menos por la sociedad que les rodea y en la que viven y de la que necesariamente deben formar parte como ciudadanos de pleno derecho. (Texto original, escrito por Christina de Lima-Netto y Federico Baudin específicamente para esta página Web y protegido con Copyright. No puede ser reproducido ni total ni parcialmente por ningún medio, sin el expreso consentimiento de Castro-Castalia por escrito). |